Bronco debate en las Corts: gritos de “¡Mazón dimisión!”, ataques del PP y Vox a Sánchez y cero respuestas sobre la DANA

“¡Mazón dimisión, Mazón dimisión!”. Con este grito por parte de la bancada del PSPV y de Compromís quedó interrumpida en un par de ocasiones la sesión de control de las Corts celebrada este miércoles, mientras los diputados del PP y de Vox trataban de aplacarlos con sonoros aplausos al presidente del Gobierno valenciano, Carlos Mazón.

El parlamento valenciano vivió una de sus sesiones más tensas, marcada por la trágica DANA que el pasado 29 de octubre dejó 228 fallecidos en la provincia de Valencia. El debate empezó con bronca por el veto del PP a que los socialistas renovaran a su representante en la vicepresidencia segunda de las Corts, tras la renuncia de Gabriela Bravo. Aunque en las 14 ocasiones anteriores en las que un miembro de la mesa se ha dado de baja se ha sustituido por otro representante del mismo partido, en esta ocasión el PP presentó a su diputada Magdalena González que resultó elegida con el apoyo de Vox.

De esta forma, el PP obtiene una mayoría absoluta en el órgano de Gobierno del parlamento valenciano que no se corresponde con su representatividad en la cámara y el PSPV se queda sin representación por primera vez en democracia. De los cinco miembros de la mesa, tres son del PP, uno de Vox y el otro de Compromís. Los socialistas ya han anunciado que llevarán esta decisión al Tribunal Constitucional.

A partir de ahí, la temperatura no hizo más que subir con las diferentes intervenciones de los síndics del PSPV, José Muñoz, y de Compromís, Joan Baldoví, y con las réplicas del presidente Carlos Mazón. Mientras la oposición insistió en el desgaste del jefe del Consell por su ausencia en las horas críticas de la DANA y pidieron reiteradamente su dimisión y la convocatoria de elecciones, Mazón, con el apoyo del portavoz de Vox, José María Llanos, se defendía sacando pecho de la aprobación de los presupuestos y atacando a Pedro Sánchez precisamente por su “incapacidad” ya no solo para aprobarlos, sino para presentarlos.

Sin embargo, el presidente del Gobierno valenciano no contestó a ni una sola de las preguntas planteadas por la oposición sobre las dudas que aún no se han aclarado sobre la gestión de la DANA, tales como el registro oficial de sus llamadas o dónde estuvo hasta que apareció en el Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) de l'Eliana a las 20.28 horas.

En el fragor del debate, se escucharon palabras gruesas como “sois unos payasos” que espetó en voz baja el vicepresidente de las Corts del PP, Alfredo Castelló, pero que recogieron los micrófonos, o un “a fer la ma” que lanzó el diputado socialista José Chulvi al conseller de Educación José Antonio Rovira, por su política con respecto al valenciano. Rovira contestó aún si tener uso de la palabra: “¡Yo hablo en el idioma que me da la gana!”, dijo.

Por su parte, el síndic de Compromís, Joan Baldoví, tuteó a Mazón porque según dijo, ha dejado de ser “su presidente, ya no es el presidente de los centenares de miles de valencianos, por lo tanto no merece la consideración de presidente aquel no guarda el respeto institucional, que abandonó a su pueblo y que es incapaz de responder y de ir al juzgado a contar la verdad”.

“Si tiene lo que hay que tener, declare ante la jueza”

El síndic socialista, José Muñoz, usó el “si tiene lo que tiene que tener” que utilizó Mazón en contra el presidente valenciano: “Si tiene lo que hay que tener declare ante la jueza y diga lo que hacía, enseñe el registro de llamadas. Si tuviera dignidad pediría perdón a las víctimas y no las utilizaría. Diga lo que hacía ese día mientras el 112 recibía 16.000 llamadas, estaba sentado en El Ventorro. Si tuviera lo que hay que tener dimitiría porque no tiene empatía ni dignidad. Le decimos que su tiempo político ha acabado, dimita y deje el pueblo valenciano tome la palabra, queremos ir a elecciones y votar”.

Mazón respondió atacando a Pedro Sánchez porque “no tiene lo que hay que tener para presentar presupuestos” y puso en valor su comparecencia en las Corts “dando la cara y respondiendo a sus preguntas” mientras aseguró que “Sánchez no va al Senado”. El jefe del Consell insistió en que “aprobar unos presupuestos es lo primero que tiene que tener un Gobierno, lo dijo Pedro Sánchez; quien pierde sin presupuestos del Estado es la Comunitat Valenciana, quien pierde sin financiación son los valencianos” y añadió que no presentan los presupuestos porque “no tienen lo que hay que tener, votos y apoyos”.

El portavoz de Compromís, Joan Baldoví, también usó la muletilla para atacar a Mazón tuteándole: “Si no tienes lo que tienes que tener no seas presidente del Gobierno valenciano. ¿Tú lo tienes? ¿Por qué no has ido a ninguna mascletà, por qué huyes de los periodistas, por qué no vas a las plazas de las zonas afectadas?. Si tienes lo que tienes que tener, ¿por qué no vas al juzgado y declaras?. No tienes lo que hay que tener, no tienes dignidad, vergüenza, decencia y por eso no mereces ser presidente, una institución centenaria no merece un presidente como tú. ¿Cuándo dimites y el mundo será un poco mejor?”

En su respuesta, Mazón calificó a Compromís como “la minoría catalanista en la Comunitat Valenciana, que reparte carnets de buenos y malos valencianos” y afirmó que “es nauseabundo que desprestigien y linchen a las víctimas que se han reunido conmigo; no hay víctimas buenas ni malas, hay víctimas, no van a instrumentalizar su dolor; no necesito su permiso para seguir reuniéndome”. Mazón aseguró que ha tenido más reuniones “con discreción y con respeto, con víctimas y afectados, sin mirar a quién votan, ni qué lengua hablan, como hice anoche en el Palau. Solo le queda el odio y la inmoralidad. Es nauseabundo lo que hacen con las víctimas de primera y segunda”.

Por su parte, el portavoz de Vox, José María Llanos, sacó pecho del acuerdo presupuestario y advirtió de “mejoras” en el trámite de enmiendas: “Hemos negociado unos presupuestos, los mejores para esta tierra. Vamos a negociar una serie de enmiendas para mejorarlos más, esto es servicio público. Es su obligación y la mía, al otro lado la nada, la descalificación, el cálculo político sobre las víctimas”.